Mi historia
Nací el 26 de agosto de 1973 en la Ciudad de México. Desde temprana edad mis abuelitos maternos me inculcaron la fe cristiana, pero fue a la edad de veinte años que experimenté un encuentro personal con Jesús quien transformó mi vida para siempre. Comprendí que El había tomado mi lugar en la Cruz lo que me llevó a arrepentirme de mis pecados y vivir para El. Encontré en Jesucristo el propósito de mi existir y desde entonces ha sido mi único y suficiente Salvador.
Estudié la licenciatura de Relaciones Internacionales y al poco tiempo, me casé con Fernando Guerin en 1997. Más tarde, Dios nos bendijo con dos varones, Alejandro y Pablo.
A pesar de haber intentado construir nuestro matrimonio sobre principios cristianos, experimentamos una profunda crisis matrimonial, derivada del adulterio de mi esposo. Solo la gracia infinita y el amor inagotable de Dios pudieron restaurar a nuestra familia y mantenernos unidos hasta el día de hoy.
Con el propósito de poder llevar esperanza en Dios a mujeres que luchan con el dolor de una traición, decidí compartir en un libro, Pábilo Humeante, lo que el Señor hizo en mi corazón en una de las pruebas más difíciles que he enfrentado.
En 2010 Dios me llamó a la educación cristiana y un año después a dirigir la escuela de mi iglesia local, Semilla de Mostaza Learning Center, en donde me ha dado la bendición de poder servirle a lado de mi esposo. La misión principal de dicha institución es formar el carácter de Cristo en cada alumno utilizando el currículum de A.C.E. (Accelerated Christian Education).
Desde hace más de diez años he tenido el privilegio de discipular mujeres para ayudarlas a crecer en su fe y fortalecer su relación con Dios y con su Palabra. Así mismo, ha sido un honor para mí, poder predicar en varias conferencias y retiros de mujeres organizados por mi iglesia local, Semilla de Mostaza México.
He entendido que el propósito de mi vida es darle a Jesucristo toda la gloria llevando su mensaje de esperanza y Salvación a quienes me rodean.
“Así que, amados hermanos míos, estad afirmes y constantes, creciendo en la obra del Señor siempre, sabiendo que vuestro trabajo en el Señor no es en vano”. 1 Corintios 15:58
Nuestro Testimonio
“Y a Aquel que es poderoso para hacer todas las cosas mucho más abundantemente de lo que pedimos o entendemos, según el poder que actúa en nosotros, a él sea gloria en la iglesia en Cristo Jesús por todas las edades, por los siglos de los siglos. Amén.”